sábado, 14 de noviembre de 2009

Caifanes - Caifanes (1988)


Cuéntame tu vida,
cuéntamela toda,
dime si estoy vivo,
si todavía respiro...

Para cuando se dió el boom del "Nervio del Volcán" del 94, ya fuimos seducidos por la Tomasa del disco "Caifanes" del año 88, ese video tosco-psicodélico y bailarín sobre una negra preciosa venía con la punky-darky imagen de la agrupación. Años después, rota la primera impresión determinista, el disco Caifanes es nomás por propio mérito un documento estereofónico esencial del rock en tu idioma (que me parece más justo que reducir el rock a cuestiones nacionales).

El siempre energético aullido de "Matenme porque me muero" de este ser que siempre encontrará sujetos en estado amoroso agudo, pasando por "Cuéntame tu vida", "Viento", "Perdí mi ojo de venado", uff, un disco completo, que por fortuna no pasó a quemarse en mi reproductor, y todavía suena fresco y oportuno que todavía quiero que "cuando me muera y me tengan que enterrar, quiero que sea con una de tus fotografías, para que no me de miedo estar abajo para que no se me olvide como es tu cara, para imaginar que estoy contigo y sentirme un poquito vivo"...



Ps. "ni con un valium" será por eso que miro y miro...

lunes, 2 de noviembre de 2009

Benjo Cruz - Grito del pueblo (1969)

El estar vinculado directamente a la historia de la lucha obrera en las minas del norte-Potosi durante las álgidas décadas de los 60 y 70, en testimonios de vida y crónicas familiares, ha contribuido sustancialmente al soundtrack de mi niñez en los 80's y mi vida en general, cuando los ecos de la represión ideológica, la tortura y las balas eran instrumentos del silencio, y la esperanza de una nueva sociedad posible se encontraban todavía vigentes.

Y aquí estamos hoy, aguantando nuevos golpes, ya no de militares ignorantes fieles al "tio sam " (no el tío de los profundos y malsanos socavones), sino de las burguesías tecnócratas políticas neoliberales.


"Hay un niño en la calle"

Los que nacieron en los noventas tienen otros paradigmas, los que nacimos unos años antes también, mi recuerdo de Benjo se remonta a esas tardes de romanticismo dominguero y añoranzas revolucionarias en la casa de mi abuelo, un enjuto y compacto hombre de cabeza pelada que había sobrevivido a la copagira, con la música sonando en la casetera, Soruco, los Savias, Milaneses, Guaraníes, Sosas, Rico, Cruz, y un largo etcétera que con el tiempo iría a descubrir con un mayor grado de conciencia.

La efervesencia revolucionaria de esos años puede llegarnos en notas y poesía, de la voz de esos autores, cronistas de realidades vigentes, en "Grito del pueblo" nos encontramos con varios temas rebozantes de sensibilidad y amor por la humanidad encarnada en la patria que le vió nacer.

"yo no quiero recitales,
yo quiero un encuentro con mi gente,
yo soy, yo soy de la gente,
yo quiero a la gente,
si es de acá es porque considero o he tomado consciencia de mi deber con la gente,
porque alguién tiene que haber que diga las cosas no es porque sea yo,
porque hay cosas para decir en última instancia..."

Benjo se fue pa'l monte como otros soñadores que creyeron ciegamente en su método, cambió la guitarra por el fusil, y su cuerpo se fundió con la pachamama que todavía cobija a su pueblo americano...

"La chaska" en voz del flaco ese...